-Me encanta cuando un plan se concreta -habría dicho Anibal
Habitualmente terminaban con esa frase los capítulos pero esa vez era diferente.
Habían viajado a la Argentina para una misión especial. Mario Barakus voló dopado
todo el trayecto.
La primera sopresa se la llevaron en ezeiza, hubo que pagar aduana por la camioneta
y no es joda. Murdok estaba como loco, para colmo le afanaron la gorra en el free shop
mientras compraba unos bonobón para la tía Eulogia.
Lo primero que hicieron cuando pudieron pasar la Aduana es tomar la autopista. Anibal
quiso hacerse el piola en el peaje y no pagar, por supuesto que le duró poco.
Bajaron en la autopista 25 de mayo, y en Parque Avellaneda les chorearon la camioneta.
Mario Barakus quiso pelearse con un grupo de bolivianos que jugaban a la pelota,
"tranquilo" dijo Fas, "yo los controlaré". A Mario lo fajaron de lo lindo, pero peor
le fué a Fas, que quedó comprometido en otras circunstancias, por decirlo finamente.
Siguieron a pié, por Flores. En Quirno y Directorio Anibal prendió un habano, y se
tomó unos minutos para pensar la movida: se iba a disfrazar de supermercadista chino
para pasar desapercibido.
El plan salió mal, la mafia china le quiso cobrar coima y Anibal se negó. Mario Barakus
otra vez se hizo el enojado y ahora si, la mafia china lo destrozó. Murdock, que será
loco pero no es salame, agarró la valija y se fue para ezeiza, o te pensás que me voy
a quedar en este país de negros? fue lo último que se le oyó decir.
Los cadáveres de Mario y Anibal desaparecieron. Fas se consiguió un puesto de cajero
en un Día Descuento y se juntó con una piba de la Paternal, se llama Laura.
La camioneta se vendió al toque en warnes.
Me encanta cuando un plan se concreta
martes, 22 de marzo de 2011
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